Había una época en la cual Europa estaba dividida entre dos fuerzas que buscaban el control del territorio: el Sacro Imperio romano y por otra, el imperio turco-otomano. En 1450 los turcos habían descubierto la importancia estratégica de los territorios de Transilvania y Valaquia como vías de acceso para la conquista de Europa. En aquel entonces el "voivoda" o gobernador de Valaquia era Vlad Dracul III, llamado también Drácula (que en rumano significa diablo). Drácul III animado por un feroz nacionalismo siguió con la tarea de vencer la invasión turca pasando a la historia como uno de los hombres más crueles y despiadados. Por ejemplo, usaba un caldero para hervir vivos a sus enemigos, despellejándolos y esparciéndoles sal. Pero se ganó el calificativo de Vlad Tepes "el empalador" a causa de su método de tortura preferido que consistía en empalar a sus enemigos. Si Vlad sospechaba que alguien lo traicionaba, lo torturaba y lo empalaba con toda su familia. Políticamente, trazó en secreto alianzas con ambos imperios consiguiendo salvar a Valaquia de la invasión extranjera. Actualmente, en Rumania, Vlad Tepes se considera un héroe nacional. Sin embargo logra trascender, sin tener alguna conexión con el vampirismo, al inspirar al escritor Bram Stoker para crear a uno de los personajes más fascinantes de la literatura y el cine de vampiros.... Drácula.
@raknida
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